Esta es su historia. Hace 10 años, cuando vinimos a vivir a Valdemorillo siempre estaba merodeando en los alrededores de nuestra casa y se enfrentaba a nuestro gato defendiendo su territorio. Seguro que se preguntaba ¿quién es este que viene a usurpar lo que es mío?. Una vecina nos dijo que llevaba años pariendo en nuestro jardín. Y poco después ocurrió, dio a luz a 4 cachorros y allí los amamantó y cuidó hasta que empezamos a darles nosotros de comer y a facilitarles camitas y casitas para que estuvieran a gusto. Aun así Mami, así la bautizamos, no se fiaba, nos bufaba y rugía echando la garra y hasta que no nos íbamos, no comía. Siempre dejaba que sus hijos comiesen antes y solo cuando estos habían acabado se acercaba a los platos y comía ella. Les dio de mamar casi seis meses, bien grandotes, ella se tumbaba y ellos se acercaban. Era una ceremonia de amor increíble.

Mami con sus cachorros de unos 5 meses

Lamentablemente la calle y los desalmados se fueron cobrando la vida de tres de ellos. Un día alguien nos trajo el cadáver de uno y nos lo dejó tirado en la escalera de la entrada, a otro le dispararon con perdigones en un ojo y no pudimos salvarlo tras intentarlo durante semanas y el tercero apareció atropellado enfrente de nuestra casa. Es curioso que digan que las gatas no se dan cuenta de estas cosas, ella les llamaba en la escalera de la calle, no sabe maullar pero gritaba yo creo que buscándoles porque cogía las mantitas donde se tumbaban y las arrastraba. Se te partía el corazón de ver algo así…notaba cuando le faltaba uno. Nuestra Gran Mami tan solo se quedó con uno y después de 7 años siguen teniendo relación de mama-bebe lamiéndose cada vez que se ven y tumbándose juntos en todo momento, es tan tierno…

Cuando dejó de darles teta, la capturamos y la castramos y ahí empezamos a practicar el método CES que hasta entonces desconocíamos.

Pero la Mami empezó a encontrarse mal, sangraba a diario y perdía pelo a causa de que sus propios dolores le hacían comérselo, nos maullaba en el felpudo intentando pedir ayuda, tenía costra en las orejas, así que la capturamos y la llevamos a operar, CARCINOMAS EN AMBAS OREJAS, por lo que se las amputaron. La tuvimos recuperándose un tiempo en una habitación encerrada, el suficiente para que en ella surtiera efecto un cambio espectacular, primero dudó hasta en salir de nuestra casa, se encontraba mucho mejor, sus dolores habían desaparecido, recuperado su pelo, apetito y hasta ganas de jugar, salió de nuevo a la calle, pero desde ese día todos y cada uno de los días nos maullaba en el felpudo y nos iba dejando “regalitos”. Curiosamente no eran los típicos regalos que un gato agradecido te puede traer, no, estos eran “humanos”: guantes de jardín, zapatillas, cajetillas de tabaco, trapos, pinzas,…Un día fue algo espectacular, estaba embarazada de mi hija, y me trajo dos pares de deportivas rosas nuevas que imagino robó de alguna casa donde se coló. En casa no dábamos crédito. Cuando me quedé embarazada del niño, también empezó a traer juguetes, peluches…cosas propias de un bebé! Era alucinante!
Ahora la Mami, lo está pasando otra vez muy mal, el carcinoma le ha salido en la nariz, donde no se puede operar, sangra continuamente y su tratamiento quimioterápico es muy costoso, nosotros no podemos asumirlo pero tampoco queremos dejar de darle esta oportunidad de seguir con nosotros, el veterinario nos ha dicho que no debemos dejarla ya salir a la calle, la tenemos en casa y lo lleva bien, sabe que no le puede dar el sol, sigue igual trayéndonos las zapatillas y peluches o juguetes que pilla de los niños continuamente por la escalera de dentro, nos maúlla todo el tiempo para que la acariciemos, esta gata que era tan salvaje ha acabado solo demandándonos mimos constantemente, pero nosotros quisiéramos darle algo más que eso, un poco de calidad de vida para que al menos lo que le quede sea digno y libre de sufrimiento.

En esta foto podemos apreciar lo avanzado que tiene el carcinoma de su nariz

Este es el costoso medicamento que estamos utilizando como última opción.

 

 

 

 

 

 

 

 

Necesita un tratamiento de quimioterapia, es una crema que se la podemos dar nosotros en casa pero cada envase cuesta 138 euros y tiene para cinco veces. Lamentablemente, cuando se acaba, pasado un mes hay que repetir la operación.
¡TE NECESITAMOS! AYUDA A ESTA A LA GRAN MAMI.

Cualquier donativo, por pequeño que sea será bienvenido. Se la madrina o el padrino de MAMI.

N° CUENTA PROTECCION FELINA VALDEMORILLO:

ES03 2100 3908 06 0200212552